Iglesia de San Pedro en Cátedra

La Iglesia de San Pedro en Cátedra es el principal templo parroquial de Villariezo, una localidad situada en el Alfoz de Burgos, a escasos 11 kilómetros al suroeste de la capital provincial. Este edificio, de estilo clasicista, se erige sobre una pequeña elevación que domina el núcleo urbano, convirtiéndose en un referente visual y espiritual para los habitantes del municipio. Su arquitectura sobria y elegante refleja la tradición constructiva de la Castilla rural del siglo XVIII.

Historia

La primera mención documental de Villariezo data del año 969, bajo el nombre de "Villa de Eriezo". Durante la Edad Media, la localidad estuvo bajo el dominio de instituciones eclesiásticas como el Cabildo Catedralicio de Burgos y el monasterio de San Pedro de Cardeña. La actual iglesia fue construida a finales del siglo XVIII, reemplazando a un templo anterior del que se conserva la torre campanario, fechada en 1702. Se atribuye su edificación a dos canteros locales, quienes utilizaron sillares de piedra perfectamente labrados para levantar el nuevo edificio.

Características

La Iglesia de San Pedro en Cátedra presenta una planta rectangular con una nave única y una cabecera poligonal. Su fachada principal se orienta al sur, siguiendo la tradición de la región. El interior destaca por su retablo mayor de estilo barroco, ubicado en la capilla mayor, que alberga una imagen de San Pedro en su cátedra. La torre campanario, de base cuadrada y construida en piedra, se eleva sobre el ángulo suroeste del edificio, aportando verticalidad al conjunto.

Uso y conservación actual

Actualmente, la iglesia sigue cumpliendo su función como lugar de culto y centro de la vida religiosa de Villariezo. Además de las celebraciones litúrgicas habituales, acoge eventos especiales durante las festividades locales, como la de San Pedro en Cátedra el 22 de febrero. El edificio se encuentra en buen estado de conservación, gracias a las labores de mantenimiento realizadas por la comunidad parroquial y el ayuntamiento. Su valor histórico y artístico lo convierte en un punto de interés para visitantes y estudiosos del patrimonio religioso de la provincia de Burgos.