Puras de Villafranca, conocida simplemente como Puras, es una localidad que forma parte del municipio de Belorado, en la comarca de Montes de Oca, provincia de Burgos. Sus raíces históricas se remontan a su pertenencia a la jurisdicción de Villafranca Montes de Oca, en el partido de Juarros, bajo un régimen de realengo. Tras la caída del Antiguo Régimen, se constituyó como municipio, aunque posteriormente fue integrado en el término de Belorado. Durante el siglo XIX, su economía estuvo marcada por la actividad minera, particularmente en la extracción de manganeso, un recurso esencial para la industrialización de la época.
La localidad está situada en un pequeño valle resguardado entre Ezquerra y San Miguel de Pedroso, rodeada de un paisaje montañoso que combina áreas boscosas y terrenos más abiertos. Destacan especialmente la Dehesa de Hayas, un parque natural de valor ecológico con árboles centenarios, y la Cueva de Fuentemolinos, una joya espeleológica que, con sus cuatro kilómetros de galerías, es la sexta del mundo en su tipo y un atractivo para los amantes de la geología.
En el pasado, Puras albergó un importante complejo minero, cuyas instalaciones han sido restauradas para convertirse en un espacio turístico que incluye talleres, oficinas, polvorines y lavaderos de mineral. Estas minas, denominadas "El Comienzo" y "Victoria", forman parte del legado industrial de la localidad.
Puras de Villafranca conserva vivas sus tradiciones. La procesión del Encuentro se celebra el Domingo de Resurrección, un acto cargado de simbolismo en el que los vecinos cambian el velo de la Virgen mientras entonan cánticos tradicionales. Otra festividad destacada es la de San Quirico y Santa Julita, que se celebra el 16 de junio con una romería a la ermita de los santos, acompañada de cantos de letanías.
Las fiestas locales se celebran en agosto, adaptándose a los calendarios festivos de las localidades cercanas, lo que fomenta la convivencia y el intercambio cultural entre los pueblos vecinos.
Hoy, Puras de Villafranca se presenta como un destino ideal para los amantes de la naturaleza y la historia. Sus recursos turísticos como la Cueva de Fuentemolinos, la Dehesa de Hayas y el complejo minero restaurado atraen a visitantes interesados en la espeleología, el senderismo y la arqueología industrial. Además, la iglesia parroquial de San Martín Obispo, dependiente de la parroquia de Belorado, añade un elemento patrimonial de interés, especialmente durante las festividades locales.