El Torreón de Fernán González, también conocido como Torreón de Doña Urraca, es uno de los monumentos más icónicos y antiguos de la villa de Covarrubias, y un testimonio clave de la historia** medieval de Castilla**. Esta fortaleza, construida en el** siglo X** con características del estilo mozárabe, fue parte fundamental de las defensas del Conde Fernán González, quien unificó los condados que dieron origen al reino de Castilla.
El siglo X fue crucial en la consolidación de Castilla como entidad autónoma dentro del reino de León. Fernán González, héroe de la Reconquista y símbolo de la resistencia cristiana frente al poder musulmán, estableció un sistema defensivo a lo largo del valle del Arlanza, donde el Torreón de Covarrubias jugaba un papel estratégico. Esta fortificación fue levantada sobre las ruinas de una construcción romana anterior, y protegía los accesos al importante enclave de Covarrubias, una villa clave en la estructura territorial del condado.
El torreón también es conocido como Torreón de Doña Urraca, en honor a la hija del conde, debido a la leyenda que cuenta que Doña Urraca fue encarcelada en esta torre por orden de su propio padre, lo que añade una capa de misticismo a la historia del lugar.
El Torreón de Fernán González es una estructura maciza de 30 metros de altura y base rectangular (10 x 14 metros), cuya arquitectura sigue la forma de una pirámide truncada. Sus muros, construidos con piedra irregular en la base y sillarejo en los niveles superiores, se estrechan hacia arriba, logrando una solidez impresionante que permitía resistir ataques.
Muros de 4 metros de grosor en la base, diseñados para soportar el asedio. Saeteras y matacanes (añadidos en el siglo XIV), que permitían la defensa activa del edificio. Planta superior, originalmente coronada por almenas, transformada en una cubierta a cuatro aguas en el siglo XV. Arco de herradura mozárabe que protegía la entrada principal, ubicada a una gran altura para mejorar la defensa. Distribución Interior El torreón está dividido en cuatro plantas, cada una con una función específica:
Originalmente, era una sala de almacenamiento o prisión, con acceso únicamente desde el piso superior mediante una trampilla.
Donde se encuentra la famosa puerta de herradura y una pequeña sala abovedada. Aquí, según la leyenda, estuvo prisionera Doña Urraca.
Una sala diáfana con troneras, que posiblemente albergaba funciones defensivas y religiosas.
El lugar donde antiguamente se situaba la terraza almenada, ofreciendo una vista panorámica del valle y una defensa estratégica. Modificaciones a lo Largo del Tiempo El torreón ha sufrido diversas modificaciones:
Siglo XIV: Se añadieron nuevas defensas, como saeteras y matacanes. **Siglo XV: **Las almenas originales fueron sustituidas por la actual cubierta a cuatro aguas. **1971: **Se realizaron restauraciones significativas, eliminando modificaciones que se habían añadido a lo largo de los siglos.
Hoy en día, el Torreón de Fernán González se ha mantenido en pie como un símbolo de la resistencia y el nacimiento de Castilla. Se encuentra restaurado y abierto al público, lo que permite a los visitantes recorrer sus antiguas plantas y disfrutar de las vistas históricas que ofrece sobre el valle del Arlanza. Este monumento es considerado un Bien de Interés Cultural, y su importancia para el patrimonio de Covarrubias y Castilla es incuestionable.