
Muralla de Villasur de Herreros
La muralla de Villasur de Herreros es un vestigio histórico que, aunque en gran parte desaparecido, aún conserva tramos visibles en el norte del casco urbano. Construida posiblemente en el siglo XIV, su función principal era la defensa y delimitación de la villa. Hoy en día, algunas viviendas se han adosado a los restos de la muralla, integrándola en la arquitectura local.
Historia
La construcción de la muralla se remonta a la Baja Edad Media, probablemente a mediados del siglo XIV. Tras la donación de Villasur de Herreros al obispado por Alfonso VIII en 1204, se cree que algún obispo durante el siglo XIV ordenó levantar la muralla para dotar a la villa de seguridad y prestigio. No obstante, la ausencia de documentos específicos y restos asociados a estructuras defensivas más complejas, como torres o fosos, sugiere que su función pudo ser más simbólica que militar.
Características
La muralla estaba construida con una base de mampostería sobre la que se levantaban muros de arcilla y canto rodado. Su trazado no era regular, adaptándose al terreno y al curso del río Arlanzón, con uno de sus lienzos paralelo al cauce. Actualmente, el tramo mejor conservado se encuentra en la zona norte del casco urbano, donde algunas casas han incorporado la muralla como parte de sus estructuras.
Uso y conservación actual
Con el paso de los siglos, la muralla perdió su función defensiva y gran parte de su estructura original fue demolida o integrada en construcciones posteriores. En 2019, el Ayuntamiento de Villasur de Herreros impulsó un proyecto de investigación para estudiar los restos existentes y determinar el trazado original de la muralla. Este proyecto incluyó excavaciones arqueológicas, análisis de paramentos y prospecciones geofísicas, que permitieron obtener una visión más clara de su extensión y características.
Viento: 2 km/hHumedad: 78%




