Torreón de Doña Lambra
El Torreón de Doña Lambra, conocido popularmente como el Cubo de la Suicida, es uno de los puntos más enigmáticos y legendarios de Burgos. Ubicado en el histórico Paseo de los Cubos, este torreón forma parte de la antigua muralla que protegía la ciudad medieval y está profundamente vinculado a la famosa leyenda de los Siete Infantes de Lara. Esta leyenda, llena de traiciones y venganzas, tiene como una de sus protagonistas a Doña Lambra, cuya trágica historia ha dejado una huella en la memoria y el patrimonio cultural de Burgos.
Historia y leyenda del Torreón de Doña Lambra
La leyenda de los Siete Infantes de Lara cuenta la historia de los hijos de Gonzalo Gustios y su trágico final, producto de la traición de Doña Lambra, noble de La Bureba, quien fue cómplice en la muerte de los jóvenes infantes junto a su esposo, Ruy Velázquez. Tras una serie de eventos marcados por venganzas, Mudarra, hermanastro de los infantes, cobra venganza al dar muerte a Ruy Velázquez. Según algunas versiones de la leyenda, Doña Lambra, afligida y atormentada por sus actos y ante la inminente venganza de Mudarra, se arrojó al vacío desde la torre más alta de la muralla burgalesa. Este hecho convirtió al torreón en el lugar conocido como el Cubo de la Suicida, un apelativo que ha perdurado en el imaginario colectivo.
Otra versión de la historia sostiene que Doña Lambra fue ejecutada por Mudarra, quien cobró justicia por la muerte de sus hermanastros. Sea cual fuere la versión, la leyenda ha dotado a este torreón de un halo trágico que sigue cautivando a quienes visitan Burgos y su patrimonio medieval.
Ubicación y características
El Torreón de Doña Lambra se encuentra al final del Paseo de los Cubos, en un tramo de la muralla medieval de Burgos que se ha conservado notablemente. Está emplazado junto a la Puerta de la Judería, antigua entrada a los barrios judío y musulmán, y constituye uno de los cubos mejor preservados de la muralla. Este torreón, de estructura imponente y robusta, ha mantenido su diseño defensivo, reflejando la arquitectura militar de su época.
A lo largo de la historia, el torreón ha tenido varios nombres. Además de Cubo de la Suicida, fue conocido también como la Torre del Invencible, en honor a un defensor anónimo que, según una leyenda adicional, resistió un asalto a la ciudad en este mismo torreón. A pesar de que esta historia no está documentada, su nombre y la leyenda han quedado en el folclore de Burgos.
Uso y conservación actual
El Torreón de Doña Lambra forma parte del patrimonio cultural e histórico de Burgos y del recorrido turístico de la ciudad. Como uno de los elementos mejor conservados de la muralla medieval, el torreón y el Paseo de los Cubos ofrecen una muestra auténtica de la arquitectura defensiva de la Edad Media. El Ayuntamiento de Burgos se encarga de su conservación, así como de mantener accesible este tramo de la muralla, que hoy en día es un lugar de paseo y de interés histórico para residentes y visitantes.
Aunque no es accesible en su interior, el torreón y el Paseo de los Cubos permiten una aproximación a la historia medieval y a las leyendas de Burgos, reforzando la identidad cultural de la ciudad y su conexión con el pasado.