Monasterio de Santa Teresa
El Monasterio de Santa Teresa en Lerma fue fundado en 1610 por iniciativa del Duque de Lerma, Francisco Gómez de Sandoval y Rojas, uno de los personajes más poderosos de la corte de Felipe III. El convento fue destinado a las Carmelitas Descalzas, una orden religiosa de gran relevancia en ese tiempo debido a la reforma espiritual liderada por Santa Teresa de Jesús.
Historia
El convento fue inaugurado el 27 de octubre de 1617, con la presencia del propio** Felipe III**. Forma parte del ambicioso proyecto del Duque de Lerma para convertir la villa en un referente político y religioso en Castilla, utilizando la arquitectura como símbolo de poder y devoción. Desde su fundación, el monasterio estuvo habitado por frailes carmelitas hasta el siglo XIX, cuando fue desamortizado. A lo largo del tiempo, el edificio ha tenido diversos usos.
Características arquitectónicas
El convento es un claro exponente del estilo herreriano, caracterizado por la austeridad y la sobriedad de sus formas, en consonancia con el espíritu de la reforma carmelita. La fachada es sencilla, con pilastras dóricas y un frontón triangular coronado por una hornacina que alberga una imagen de Santa Teresa. Este estilo refleja la búsqueda de simplicidad y pureza que predominaba en la época.
El edificio tiene un claustro central de dos alturas, que hoy en día alberga diferentes dependencias municipales, incluyendo la Oficina de Turismo de Lerma. Además, en el sótano y las bodegas del convento se ha instalado el Centro de Interpretación de la Villa Ducal, donde los visitantes pueden aprender más sobre la historia de Lerma y el papel del Duque en su desarrollo.
Uso actual y conservación
En la actualidad, el Convento de Santa Teresa ha sido adaptado para nuevos usos, como la sala de exposiciones para eventos culturales y artísticos en su claustro, y algunas de sus instalaciones se utilizan para las funciones administrativas del ayuntamiento. También se mantiene como parroquia bajo el nombre de Iglesia de San Juan. Estos usos han permitido su conservación y continúan atrayendo a numerosos turistas interesados en su valor histórico y arquitectónico.