Eremitorio de Peñarota
El Eremitorio de Peñarota, situado en una prominente roca arenisca cerca de la localidad de Salas de los Infantes, es un notable conjunto de cuevas excavadas en la roca, datadas entre los siglos VIII y IX. Este conjunto eremítico, compuesto por varias pequeñas cavidades, refleja el fenómeno de los eremitas en la provincia de Burgos, donde se establecieron numerosas comunidades religiosas aisladas en busca de una vida de privación y dedicación espiritual.
Historia
El fenómeno eremítico está muy presente en la historia medieval de la provincia de Burgos. Los eremitas, personas que buscaban el retiro espiritual, encontraban en estos lugares apartados la oportunidad de llevar una vida austera, lejos de las distracciones mundanas. No obstante, en tiempos de expansión cristiana hacia territorios dominados por los musulmanes, estos eremitorios también jugaron un papel importante en la repoblación de las tierras del norte de Castilla, sirviendo como núcleos de crecimiento para pequeñas comunidades.
El Eremitorio de Peñarota, con** 13 cavidades** que han sobrevivido hasta nuestros días, es uno de esos ejemplos. Aunque el conjunto pudo haber sido más amplio, parte de las cuevas se perdió con la construcción de una carretera cercana que requirió la demolición de parte de la roca. Estas cuevas eran utilizadas por los eremitas como lugar de refugio y oración, y formaban parte de un sistema de comunidades religiosas que ayudaban a la expansión de la fe cristiana en una época de conflicto.
Características
El eremitorio está compuesto por pequeñas cavidades excavadas en la roca, cada una con distintos tamaños y formas. Estas cuevas están distribuidas de manera irregular en la prominencia de la roca, aprovechando la naturaleza geológica del lugar. Aunque algunas de estas cuevas se encuentran dañadas o parcialmente destruidas, la mayoría ha logrado conservar su estructura original.
El material principal es la roca arenisca, fácil de tallar pero también propensa a la erosión. Las cuevas, a lo largo del tiempo, fueron utilizadas como habitaciones y lugares de culto. Las características de las cuevas muestran que los eremitas adaptaban las condiciones naturales del entorno para construir un espacio adecuado a su estilo de vida, con entradas modestas y poco decoradas.
Uso actual y conservación
En la actualidad, el Eremitorio de Peñarota ha sido acondicionado para facilitar su visita. Se han instalado pasarelas y señalizaciones que guían a los visitantes por el conjunto, permitiendo una mejor comprensión de la vida de los eremitas en la Alta Edad Media. Además, es posible realizar un paseo hasta el Puente de San Miguel, una formación natural de arenisca en forma de puente que ofrece vistas panorámicas de Salas de los Infantes y su entorno.
La conservación del eremitorio ha sido clave para preservar este legado histórico, aunque algunos elementos han desaparecido debido a la erosión y las intervenciones humanas, como la mencionada carretera. No obstante, las medidas actuales de protección han permitido mantener y difundir este singular espacio histórico.
Viento: 7 km/hHumedad: 83%