La Ermita de San Pantaleón de Losa, es una joya por todos los costados, su ubicación en la cima de la Peña Colorada, una elevación del terreno, que se eleva como si fuera la proa de un barco o tratara de llegar al cielo como una rampa de despegue, es una montaña pulida y moldeada por el río Jerea que albergado a lo largo de la historia un castro de la Edad de Hierro, pero posteriormente ocupado en la época romana, al ser un lugar de extraordinaria visibilidad y fácil de ser protegido.
Su ermita, se empezó a construir en el siglo XIII, dedicada a San Pantaleón, martir cristiano del siglo III y que en esta ermita se representan los seis procesos de ejecución que sufrió, hasta terminar siendo decapitado y que se recoge con una iconografía enigmática hecha en un único proceso creativo.
Pero este lugar sigue dando diversas interpretaciones y teorías con respecto a su ubicación, construcción, iconografía y la prodigiosa licuefacción de la sangre de San Pantaleón, junto con el hecho de la pertenencia a la Orden de San Juan de Jerusalén han desarrollado teorías y escritos que lo relacionan con la leyenda del Santo Grial.