Iglesia de San Esteban - Museo del Retablo
La** Iglesia de San Esteban**, situada en la ladera que lleva al castillo de Burgos, es una joya del gótico burgalés que ha sido transformada en el Museo del Retablo, un espacio cultural creado para preservar y exponer retablos y piezas litúrgicas de gran valor histórico. Este museo único alberga una colección de retablos, esculturas, orfebrería y arte funerario procedentes de pequeñas iglesias de la provincia de Burgos, y su rica colección lo convierte en un lugar indispensable para los amantes de la historia y el arte sacro.
Historia de la Iglesia de San Esteban
Construida entre finales del siglo XIII y principios** del XIV**, la iglesia de San Esteban reemplazó a un templo románico anterior. Desde su inicio, San Esteban ha reflejado el esplendor del gótico castellano con una estructura de tres naves, ábsides poligonales y un claustro adosado en su lado sur, una característica poco común en las iglesias burgalesas. A lo largo de los siglos, ha sido testigo de numerosos cambios, como las reparaciones tras la Guerra de Sucesión Castellana en el siglo XV y las renovaciones de los siglos posteriores.
El abandono de culto y la amenaza de deterioro motivaron su conversión en el Museo del Retablo, un proyecto impulsado por el canónigo Agustín Lázaro, con el apoyo de la diócesis, para conservar y proteger los retablos y otras piezas de arte sacro de iglesias en despoblación.
Características arquitectónicas
La iglesia de San Esteban destaca por su fachada gótica y por una torre campanario singular que, al situarse sobre el último tramo de la nave central, rompe con el estilo típico de las fachadas “armónicas” de la época. La portada occidental presenta un tímpano decorado con una representación del Juicio Final y la Déesis (Cristo flanqueado por la Virgen María y San Juan Evangelista), mientras que en el registro inferior se representa la lapidación de San Esteban, el patrón de la iglesia.
En el interior, las naves están separadas por arcos apuntados que reposan sobre pilares fasciculados. La bóveda es de crucería sencilla, siguiendo el modelo de la Catedral de Burgos, pero en un estilo más sobrio. En su claustro y sala capitular, adyacentes a la iglesia, se pueden apreciar elementos de crucería en su cubierta que datan del siglo XIV.
Museo del Retablo: Piezas y colecciones
El Museo del Retablo reúne una destacada colección de retablos de los siglos XV al XVIII, procedentes de distintas iglesias burgalesas, así como piezas de orfebrería, esculturas y pinturas. La colección incluye 18 retablos que abarcan estilos que van desde el gótico hasta el barroco, con ejemplos notables como:
Retablo Mayor de San Esteban: Un retablo neoclásico que conserva su lugar original en la capilla mayor. Retablo de San Juan Bautista y Santa Catalina: Obras renacentistas romanistas del siglo XVI. Retablo de la Virgen Inmaculada: Un retablo barroco churrigueresco, obra del retablista José Valdán. Retablo de San Miguel Arcángel y de Cristo Resucitado: Piezas del siglo XVII que destacan por su detallada policromía. La sección de orfebrería, situada en el coro, incluye cruces procesionales de los siglos X al XVIII, cálices y custodias, como la famosa cruz procesional mozárabe del siglo X procedente de Villorobe y el crucifijo de aplique románico del siglo XII.
Uso y conservación actual
El Museo del Retablo es una iniciativa de la diócesis de Burgos para proteger y exponer piezas artísticas en riesgo de deterioro, y solo abre sus puertas durante el verano, de julio a septiembre, con un horario reducido. Aunque la iglesia ya no celebra culto, el museo mantiene el espíritu de devoción de sus retablos y esculturas, permitiendo a los visitantes apreciar estas obras de arte en un entorno adecuado.