El municipio de Los Altos, situado en el norte de Burgos, tiene su origen en la división administrativa de la Merindad de Valdivielso a principios del siglo XX, cuando se consolidó como un ente independiente. Su historia más antigua está marcada por la presencia humana desde la Prehistoria, como demuestran los dólmenes de El Moreco y La Cotorrita. Durante la Edad Media, formó parte del Partido Alto de la Merindad de Valdivielso, reflejando la organización político-administrativa de Castilla La Vieja.
Los Altos es un municipio que combina núcleos rurales pequeños, como Ahedo de Butrón, Escóbados de Abajo y Villaescusa del Butrón. Con una población de poco más de 200 habitantes, destaca por sus tradiciones agrícolas y ganaderas. Su entorno natural y su patrimonio arquitectónico han promovido un crecimiento en el turismo rural y actividades al aire libre, reforzando la conexión entre cultura y naturaleza en Las Merindades.
El paisaje de Los Altos es un contraste entre el páramo castellano y los profundos cañones calizos modelados por los ríos Ebro y Rudrón. Parajes como la Hoya de Huidobro, rodeada de bosques de robles y hayas, y el desfiladero de los Tornos, son ejemplos del entorno espectacular. La zona es un refugio para la fauna, incluyendo aves rapaces, y un lugar ideal para el senderismo, la pesca y el piragüismo.
El municipio destaca por su legado románico, visible en iglesias como la de Ahedo de Butrón, la iglesia de Huidobro y la ermita de Nuestra Señora de la Oliva en Escóbados de Abajo, que cuentan con excepcionales decoraciones escultóricas. Además, los conjuntos urbanos de Tudanca y Ahedo de Butrón conservan el encanto de la arquitectura popular, con casonas, molinos y fuentes que narran siglos de historia rural