Aguas Candidas
El municipio de Aguas Cándidas se encuentra en el corazón del Valle de las Caderechas, una de las zonas más bellas de Burgos, a unos 30 km al noroeste de Briviesca y a 60 km de la capital provincial. Este tranquilo pueblo, con una historia que se remonta a la donación del lugar por Alfonso VII en 1133 al Monasterio de San Salvador de Oña, ha sido calificado de realengo, como menciona el Catastro de Ensenada. Aguas Cándidas conserva un rico pasado que incluye referencias al dominio eclesiástico y a la estructura de las antiguas comunidades burgalesas, lo que aún se aprecia en sus iglesias y arquitectura medieval.
El núcleo de Aguas Cándidas destaca por la iglesia de San Juan Bautista, un edificio renacentista con un ábside rectangular y una portada con arco de medio punto que conserva detalles de una puerta más antigua. La iglesia presenta también una singular espadaña que contiene dos campanas y está decorada con elementos en frontón y bolas, en un estilo típico de la época. Aguas Cándidas es un pueblo pequeño, pero ofrece un ambiente auténtico y apacible que refleja su legado histórico.
Dentro del municipio, la localidad de Río Quintanilla también merece mención. Se trata de un enclave de apenas 30 habitantes, dividido en dos barrios: Río y Quintanilla, que conservan el encanto rural. Entre ambos se alza la iglesia románica de los santos Emeterio y Celedonio, al pie del pico Castilviejo. Además, el torreón medieval de Río Quintanilla, que data entre los siglos VIII y XV, constituye uno de los mejores ejemplos de arquitectura defensiva de la zona, pues fue construido para vigilar el acceso al valle y proteger a sus habitantes.
Aguas Cándidas también es un punto de partida para explorar el Valle de las Caderechas, especialmente en primavera, cuando los cerezos en flor ofrecen un espectáculo inolvidable. Con alrededor de 50,000 árboles, el valle se convierte en un mar blanco que atrae a visitantes de toda la región. Un centro de interpretación en Salas de Bureba permite conocer más sobre este entorno natural, parte de la red de Museos Vivos de Castilla y León. Aguas Cándidas y el Valle de las Caderechas son destinos de gran belleza que combinan historia, naturaleza y tradición.