
Hurones
Hurones es un municipio del Alfoz de Burgos, situado apenas a unos 11 km de la ciudad de Burgos, con una extensión modesta de alrededor de 8,29 km² y una altitud que lo sitúa sobre los 900 metros sobre el nivel del mar. En su término se incluye también la pedanía de Las Mijaradas, siendo este municipio una de las puertas rurales hacia los valles del entorno. Su cercanía a la capital lo convierte en un lugar accesible y al mismo tiempo sorprendente por conservar un ambiente rural compacto, íntimo, con apenas una decena de núcleos dispersos y una población muy reducida que invita al visitante a descubrir un trozo auténtico de Burgos.
La historia de Hurones se remonta al medioevo, aunque sus raíces podrían situarse aún más atrás gracias a los restos hallados en su entorno. En su término, en el pago conocido como La Lentejera, se han descubierto fragmentos romanos y monedas que sugieren actividad humana ligada a la Vía Aquitania —la antigua calzada romana que conectaba lugares como Astorga con Burdeos—, y que discurre junto al sur del municipio, pasando cerca de Las Mijaradas. En el siglo XII y XIII, la iglesia parroquial de Santiago Apóstol fue construída por la escuela románica de La Bureba, manteniendo su traza original en el ábside semicircular, aunque con añadidos posteriores como la nave y la torre. A lo largo del tiempo, Hurones fue sobreviviendo a cambios territoriales, despoblaciones y transformaciones agrarias, aferrándose a su paisaje y tradiciones para mantener su identidad frente a la migración de los siglos XX y XXI.
Visitar Hurones es adentrarse en un territorio que combina historia, piedras bien trazadas y paisajes suaves. Su iglesia románica de Santiago Apóstol es uno de sus emblemas patrimoniales, con la sencillez del románico que dialoga con añadidos posteriores. La huella de la antigua calzada romana agrega un valor arqueológico y de ruta que conecta el pasado con el presente. Además, la localidad ofrece un entorno tranquilo para contemplar la naturaleza, disfrutar del cielo limpio o dejar que los rincones rurales revelen su calma.
En Hurones puedes recorrer senderos que se internan en el campo, seguir el trazado de caminos antiguos (incluso parte de la antigua calzada romana reconvertida en ruta local), dedicar momentos a la fotografía del paisaje y la arquitectura tradicional, disfrutar de la gastronomía local y combinar tu visita con la exploración de Las Mijaradas. Te invitamos a perderte por sus calles de piedra, descubrir su silencio y sentir la conexión entre el pasado y el presente que late en cada rincón de Hurones.



